Manuel Liñán será el artista invitado de este año para la Gala de Premiados del Certamen, el próximo día 11 de Junio a las 20:00hs en el Teatro Fernán Gómez. Aquí os dejamos una entrevista en la que podemos conocer un poco más sobre este artista y su concepción del flamenco.

¿Qué supuso para tu carrera la participación en el Certamen de Flamenco y Danza Española? ¿Consideras que esta clase de certámenes son un buen barómetro para ver los nuevos caminos que van tomando el flamenco y la danza española?

Primeramente me ofreció una oportunidad donde poder presentar una pieza que no fuera estrictamente flamenca, si no una creación coreográfica libre donde pude experimentar aquello que quería: entre la tradición del flamenco y la vanguardia. Es un escaparate bastante importante por poder mostrar tu trabajo e impresiones de la danza. Ganar los premios  fue un impulso para seguir creando y darte a conocer.

Por supuesto se muestra un gran abanico de posibilidades y de creadores algunos desconocidos y otros no, con unas propuestas muy interesantes. Es imprescindible este tipo de certámenes.

¿Cómo definirías tu estilo coreográfico?

No sabría decirte, supongo que cada persona lo recibirá de una forma u otra, me expreso como siento, sin ataduras, con toda la libertad del mundo, me gusta moverme entre la tradición y la vanguardia, me considero inquieto y siempre tengo algo que contar.

A nivel coreográfico has realizado una gran cantidad de proyectos tanto individuales como en colaboración, ¿En qué se diferencia cada tipo de trabajo y qué te aporta cada uno?

Cada trabajo nace de una sensación diferente o un estímulo diferente, partiendo de ahí, siempre hay diferencias.

Cuando eres tú el intérprete y creas algo para ti lo haces desde tu inquietud, tu necesidad, o tus emociones, cuando creas para lo demás como por ej. El BNE te pones al servicio de los bailarines, los analizas, e intentas sacar lo mejor de ellos, dejando parte de tu creatividad en el resultado.

Cada cosa te aporta sensaciones diferentes, como intérprete me expreso libremente y como coreógrafo, intento ser el vehículo para que los demás puedan expresarse.

¿En qué punto dirías que te encuentras actualmente  a nivel profesional? 

Feliz de poder seguir creando libremente aunque cada día cueste más.

Ahora con nuevos proyectos.

En distintas ocasiones has realizado espectáculos flamencos en los que se incluían otros estilos artísticos, ¿Cómo se consigue conjugar todo esto manteniendo la esencia del flamenco?

Vengo del mundo del flamenco y mis bases han sido flamencas, supongo que eso siempre queda impregnado aunque tenga la libertad de coquetear con otros estilos de danza, o simplemente tener la inquietud de conocerlas.

¿Cómo ves la situación actual del flamenco y hacia dónde crees que se dirige?

No sé dónde se dirige, eso está en manos de todos los intérpretes y creadores, lo que sé, es que el flamenco sigue llegando lejos y se está situando en grandes festivales internacionales de danza, gracias a la evolución de este y gracias a su conservación. Digamos que sigue existiendo varias texturas, algunas más ortodoxas y otras más progresistas, eso me parece genial y hay que respetar las dos. Pues son las distintas caras del arte, el flamenco para mí no tiene un solo perfil.

Háblanos un poco de lo que podremos ver el próximo día 11 en el Teatro Fernán Gómez

Pues es una pieza que no tiene ningún argumento, solo la necesidad de seguir creando, para ello he contado con David Carpio, cantaor, con el que me siento muy a gusto trabajando. Y decidimos hacer un encuentro sin buscar nada solamente para poder cantar, bailar y experimentar lo que quisiéramos, sin atarnos a ningún guion.