Evocación a Apolo es una coreografía inspirada en el dios de la mitología griega, conocido como dios del sol y la luz, la música, la poesía y las artes. En ella recuerdan algunos momentos como su nacimiento en una isla rodeado de cisnes, la lucha contra la serpiente pitón y el flechazo de amor por Dafne, donde Apolo es rechazo por la ninfa y termina convirtiéndola en hojas de laurel.
Manuel Alejandro Ramírez baila actualmente en la compañía de Sara Baras en su nuevo espectáculo La Pepa. Nace en Cádiz en 1989. Inicia su estudios en danza española y flamenco en el conservatorio profesional de danza «Maribel Gallardo», al mismo tiempo que estudiaba con Antonio «El Pipa» y la Chiqui de Jerez. En 2008 es seleccionado en el Centro Andaluz de Danza, becado por dos años con profesores como: Trinidad Sevillano, Anael Martín, Genesia Kindelan, los hermanos Pericet (Ángel, Carmen y Eloy), Ana Mª Bueno, Rubén Olmo, Rocío Coral. A sus 19 años crea su propio espectáculo Sueño en flamenco en el Teatro Moderno de Chiclana de la Fra. (Cádiz), y en 2010 se estrena en la Bienal de Sevilla como primer bailarín de la compañía de Miguel Vargas en el teatro Lope de Vega. Trabajó en el tablao flamenco de Sevilla «El Palacio Andaluz», y en marzo de 2011 abre telón al Festival de Jerez con la compañía de Antonio «El Pipa». En mayo de este mismo año vuelve a bailar Danzacalí de Antonio «El Pipa» como primer bailarín en el Teatro Cervantes de Málaga, y en septiembre trabaja de bailarín en el programa de televisión de canal sur «Se llama copla». Ha sido finalista y representante de Cádiz en el concurso de jóvenes flamencos 2012, y en septiembre de este año vuelve a pisar la Bienal de Sevilla en el Teatro de la Maestranza con la compañía de Rafael Estévez y Nani Paños con su espectáculo La Consagración, galardonado con el premio Giraldillo a la mejor coreografía.